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En un mundo cada vez más consciente de la necesidad de proteger el medio ambiente, las empresas juegan un importante papel en la reducción de su impacto ambiental. Obtener un certificado verde para empresas no solo es una demostración de responsabilidad social corporativa, sino también una forma de diferenciarse en el mercado.
Este artículo te explicará qué es este sello verde, los distintos tipos que existen, la importancia de contar con uno y cómo tu empresa puede obtenerlo y mostrarlo en toda su imagen corporativa.
¿Qué es el certificado verde para empresas?
El certificado verde para empresas es una acreditación otorgada a aquellas empresas que implementan prácticas sostenibles y responsables con el medio ambiente. Las entidades que se encargan de otorgar el certificado verde para empresas son generalmente organismos independientes y acreditados que siguen normas y estándares internacionales, como puede ser la Asociación Española de Normalización y Certificación (AENOR)
Las empresas pueden exhibir estos sellos en toda su imagen corporativa. Garantizan a consumidores, usuarios y clientes que la compañía está comprometida con la reducción de su impacto ambiental, incluyendo la fijación del CO₂ atmosférico causante del cambio climático.
En el caso de las comercializadoras de energía, el certificado o sello verde, también es conocido como Garantía de Origen (GdO), con formato electrónico y un periodo de validez de un año, reúne los kWh que la compañía ha producido durante un periodo específico con energía renovable. La autoridad competente encargada de la concesión es la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
Importancia del sello verde para empresas
Obtener un sello verde para empresas no solo demuestra su responsabilidad social corporativa (RSC), sino que también ofrece numerosos beneficios:
- Reducción de costes: la implementación de prácticas sostenibles a menudo lleva a la eficiencia energética y la reducción de gastos operativos. Para más detalles sobre cómo lograr esta eficiencia, te damos una serie de trucos para de ahorro energético para tu empresa.
- Acceso a subvenciones: los negocios con certificaciones verdes pueden acceder a ciertas subvenciones específicas. Conoce más sobre esto en nuestro artículo sobre ayudas de ahorro energético para empresas.
- Se evitan sanciones: estos sellos permiten a las empresas cumplir con las normativas y estándares ambientales evitando problemas de tipo legal.
- Fomento de la lealtad del cliente: los consumidores y clientes potenciales tienden a preferir empresas que demuestran un compromiso genuino con el medio ambiente.
- Mejora de la imagen corporativa: exhibir el certificado verde permite a la empresa destacar como medio ambientalmente responsable, lo que puede atraer a consumidores y usuarios cada vez más conscientes de la sostenibilidad.
- Ventaja competitiva: las empresas que participan activamente en programas de sostenibilidad y que tienen un sello verde pueden diferenciarse de sus competidores.
Además, existe una estrecha relación entre los certificados verdes y los Certificados de Ahorro Energético (CAE). Los CAE acreditan el ahorro de energía conseguido aplicando medidas de eficiencia energética, un componente esencial para obtener un certificado verde. Las empresas que logran obtener ambos certificados pueden maximizar sus beneficios y reforzar su imagen como entidades responsables con el medio ambiente.
Tipos de certificado para empresas
Existen varios tipos de sellos verdes para empresas que pueden variar según el sector y la actividad de la empresa. Algunos de los más comunes son:
- Certificación B Corp: sello para las empresas que cumplen con los diferentes estándares de aspecto social y ambiental.
- Certificado LEED: certificación de Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental, para edificios sostenibles y eficientes en el uso de energía y recursos.
- ISO 14001: una norma internacional que especifica los requisitos para un sistema de gestión ambiental efectivo.
- EMAS: el Sistema Comunitario de Gestión y Auditoría Medioambientales de la Unión Europea, que es más exigente que ISO 14001.
- Sello FSC: es un certificado sobre la gestión forestal sostenible que garantiza el origen responsable de productos.
- BREEAM: un método de evaluación de la sostenibilidad para proyectos de construcción.
Las normativas ISO son las más señaladas por estar marcadas por la Organización Internacional de la Estandarización, que regula la gestión, sostenibilidad y eficiencia de las empresas, donde también se puede señalar el Certificado de Gestión Energética (ISO 50001).
¿Cómo obtener el sello verde para empresas?
Para obtener un sello verde para empresas, es necesario seguir una serie de pasos que aseguren el cumplimiento de los estándares medioambientales requeridos:
- Evaluación inicial: realiza una auditoría para identificar áreas de mejora en términos de sostenibilidad y eficiencia energética. Puedes comenzar revisando nuestras guías sobre eficiencia energética para empresas y trucos de ahorro energético.
- Implementación de mejoras: aplica cambios en tus procesos y prácticas empresariales para reducir el impacto ambiental. Esto puede incluir desde la reducción de emisiones de CO₂ atmosférico causante del cambio climático hasta la optimización del consumo de recursos.
- Formación y sensibilización: asegúrate de que todo el personal esté comprometido con las nuevas prácticas medioambientales a través de programas de formación y sensibilización.
- Certificación: contacta a una entidad certificadora acreditada para realizar una auditoría externa. Esta entidad evaluará si tu compañía cumple con los criterios establecidos para el certificado verde.
- Mantenimiento y mejora continua: una vez obtenido el certificado, es crucial mantener las prácticas sostenibles y buscar continuamente nuevas formas de mejora.
Las empresas que logran obtener y mantener este tipo de certificación demuestran su compromiso con la responsabilidad social corporativa, participando activamente en proyectos como la plantación de árboles para la fijación del CO₂ atmosférico, patrocinando programas de responsabilidad social y colaborando en la lucha contra el calentamiento global.
Por último, para aquellas compañías interesadas en reducir aún más su impacto ambiental, explorar un plan de movilidad sostenible puede ser una excelente opción. Este plan puede contribuir significativamente a la reducción de emisiones y al fomento de un entorno laboral más saludable y sostenible.