Sigue estos pasos para convertir tu coche a GLP
La conversión de un vehículo es un proceso que, aunque complejo, conlleva un ahorro significativo y un menor impacto ambiental. Si te decides a dar este paso, a continuación, te explicamos de forma sencilla cómo hacerlo.
1. Investigación y asesoramiento
Antes de tomar cualquier decisión, contacta con profesionales especializados en la adaptación de vehículos. Ellos te ofrecerán información detallada sobre la viabilidad de tu coche y la inversión necesaria.
2. Elección del kit de conversión adecuado
Existen diferentes tipos de kits, y su elección dependerá de las características de tu coche. Consulta cuál es el mejor para tu vehículo.
3. Instalación por un profesional certificado
Aunque pueda parecer tentador hacerlo tú mismo, es mejor que la instalación sea realizada por un profesional certificado. Esto garantiza tanto la seguridad como la eficiencia del sistema.
4. Realizar pruebas
Una vez instalado el kit, el taller deberá efectuar diversas pruebas para garantizar que el sistema funciona correctamente y que el cambio entre gasolina y GLP se lleva a cabo sin problemas.
5. Homologación
Tras la conversión, necesitarás obtener una homologación que certifique que tu coche cumple con las normativas vigentes tras la adaptación. El taller te asistirá en este proceso.
6. Modificación del permiso de circulación
Con la homologación en mano, debes dirigirte a la entidad correspondiente para modificar el permiso de circulación de tu vehículo.
7. Mantenimiento periódico
Por último, como con cualquier sistema, es esencial realizar un mantenimiento periódico. Aunque el gas es menos corrosivo que otros combustibles, se debe revisar el sistema al menos una vez al año para asegurar su correcto funcionamiento.
¿Merece la pena realmente? Esto es lo que tardas en recuperar tu inversión
Adaptar un coche a GLP supone una inversión inicial, lo que lleva a muchos a preguntarse si realmente vale la pena. Para responder a esta inquietud, es crucial entender el ahorro a largo plazo:
- Beneficios fiscales y descuentos: Es habitual que estos vehículos disfruten de beneficios fiscales, descuentos en peajes o estacionamientos e incluso acceso a zonas restringidas. Estos incentivos pueden compensar rápidamente la inversión inicial.
- Durabilidad del motor: Este combustible es menos corrosivo y genera menos residuos, lo que aumenta la vida útil del motor y reduce los gastos en mantenimiento.
Tomando en cuenta estos factores, muchos usuarios recuperan su inversión en un período de 1 a 2 años, dependiendo del uso del vehículo y los precios del combustible.