Todos hemos vivido la situación de estar en casa tranquilamente y que de golpe salte el diferencial y nos quedemos sin luz. Es algo normal, lo más habitual es que sea por haber pasado el límite de potencia contratada y suele arreglarse conectando otra vez el interruptor. Pero, si es algo frecuente, o no vuelve la luz, podría ser un indicativo de otros problemas. En este artículo te explicamos todos los casos por los que puede saltar el diferencial de la luz.
El diferencial está en mal estado o dañado
La función principal del diferencial de la luz es evitar que haya accidentes domésticos producidos por la electricidad. Para ello, el diferencial corta la luz antes de que exista la posibilidad de un accidente de gravedad.
Si al subir el diferencial, sigue sin volver la luz, existe la posibilidad de que no funcione o esté en mal estado, en ese caso tendrás que llamar a un electricista para que venga a revisarlo y, si fuese necesario, a cambiarlo. Para ello, usan un equipo de medición, que les permite conocer el estado del dispositivo y, si es necesario, cambiarlo. Puedes encontrarte en esta situación en edificios anteriores al 2000, en los que las instalaciones son más antiguas y no estaban tan preparadas como las actuales.
Problemas con la instalación eléctrica
Como hemos visto antes, el diferencial sirve como método preventivo para que no haya accidentes graves con la corriente eléctrica. Así que en caso de que haya un problema con la instalación eléctrica, el diferencial saltará.
Si este es el caso, habrá que revisar de donde viene el problema. Es habitual que se deba a un cable mal aislado que acabe repercutiendo en toda la red eléctrica.
Algún problema al encender un aparato o electrodoméstico
Si salta el diferencial en el momento de conectar un electrodoméstico, es probable que el error provenga de éste. Si es el caso, lo mejor es dejarlo desconectado hasta que venga un técnico a revisarlo.