Mantener tu caldera en perfecto estado no solo es una cuestión de comodidad y ahorro, también es una obligación. La revisión caldera gas es un proceso fundamental para garantizar el correcto funcionamiento del equipo, así como tu seguridad, la eficiencia energética de tu hogar y el cumplimiento de la normativa vigente de las instalaciones.
¿Es obligatoria la revisión de las calderas de gas?
Sí, el Reglamento de las Instalaciones Térmicas en los Edificios (RITE) establece la imposición de la revisión obligatoria de las calderas de manera periódica para garantizar la seguridad, durabilidad y eficiencia de estos aparatos. No realizarla puede implicar sanciones legales y riesgos para tu hogar. Este proceso se centra en el aparato en sí y debe realizarse cada uno o dos años, siendo responsabilidad del propietario llevarla a cabo.
Por otro lado, la inspección obligatoria de gas cubre toda la instalación, incluyendo tuberías, contador y ventilación, y se realiza cada cinco años (cuatro en el País Vasco). Aunque la responsabilidad recae en el propietario, la empresa distribuidora de gas suele notificar cuándo debe realizarse.
Ambas verificaciones añaden importancia al hecho de mantener tus equipos en óptimas condiciones. No cumplir con ambas puede acarrear sanciones. Para más información, consulta nuestro artículo sobre la nueva normativa de calderas de gas.
¿Cada cuánto hay que revisar la caldera de gas?
La frecuencia con la que debes revisar caldera gas depende de su potencia:
- Calderas de potencia ≤ 70 kW: generalmente cada 2 años, pero depende de la comunidad autónoma, por ejemplo, en el País Vasco, la revisión obligatoria es anual.
- Calderas de potencia > 70 kW: estas calderas, utilizadas en sistemas centralizados, requieren inspecciones mensuales.
- Calentadores de agua ACS ≤ 24,4 kW: cada 5 años.
- Calentadores ACS entre 24,4 kW y 70 kW: cada 2 años.
Aunque la ley exige una revisión bienal, muchos expertos recomiendan realizarla anualmente de forma preventiva. Esto permite detectar averías antes de que se conviertan en problemas graves, asegurando el correcto funcionamiento de la caldera y mejorando su eficiencia energética. Recuerda, es fundamental cumplir con estos plazos para evitar problemas y garantizar tu seguridad.