Sí, tener estufas de gas en tu hogar es seguro. Estos sistemas de calefacción llevan mucho tiempo dentro de las viviendas para su calentamiento durante las épocas más frías.
Dentro de los diferentes tipos de estufas que existen, las de gas, con el paso de los años, han ido evolucionando hasta conseguir aparatos de calefacción potentes y que aportan seguridad a los usuarios que las utilizan en su casa. En este artículo te mostraremos cuáles son los modelos más seguros y cómo ganar tranquilidad en el hogar.
¿Son peligrosas las estufas catalíticas?
Las estufas catalíticas son seguras, sobre todo, los modelos más modernos. Esto se debe a un motivo principal: no tienen una llama abierta o quemador, ya que utilizan paneles de radiación para calentar, previniendo así el sobrecalentamiento. Esto te proporciona un punto de prevención extra frente a niños, mascotas y otros aparatos.
Estos aparatos incorporan diferentes sistemas de seguridad, así, si se produce un fallo, se apagarán automáticamente, evitando cualquier accidente. Además, con su encendido piezoeléctrico, se facilita el encendido y el apagado del panel, para hacerlo mucho más rápido.
Aunque cuentan con mecanismos de protección eficientes, verifica regularmente las conexiones de gas para detectar posibles fugas. Si alguna vez has sentido un olor extraño mientras la estufa estaba encendida, puedes consultar aquí si es normal ese olor a gas.