Las diferentes alternativas de tarifas de la luz han hecho que los consumidores estén más informados sobre conceptos como el kWh, la potencia de la luz o las tarifas de discriminación horaria. Una de las dudas más frecuentes, y que vamos a explicarte a continuación, es cómo se regula el precio de la luz.
Conocer el funcionamiento del mercado eléctrico es clave para saber si una tarifa con discriminación horaria es adecuada para ti. Además, te ayudará a adoptar un modelo de consumo más rentable al elegir las horas más baratas para usar tus electrodomésticos. Sigue leyendo este post en el que te contamos todo lo que necesitas saber sobre la determinación del precio de la luz y a qué hora es más barata la luz.
Tarifa regulada y tarifa libre: ¿en qué se diferencian?
La principal diferencia entre la tarifa libre y regulada radica en la forma de calcular el precio:
- En la tarifa regulada, el precio se establece diariamente y se ajusta según la discriminación horaria, lo que significa que varía dependiendo del momento del día en que se consume la energía.
- Por otro lado, la tarifa libre no se rige por esta discriminación horaria; en su lugar, el precio se negocia directamente con las compañías eléctricas en un contrato personalizado.
¿De qué depende el precio de la electricidad?
En la tarifa regulada, el precio de la electricidad varía a diario, influenciado por factores de oferta y demanda en el mercado energético. Mediante un análisis de la facturación se determina un coste. Y estos precios se publican diariamente en la web de la Red Eléctrica de España.
Oferta
La oferta de electricidad está determinada por los distintos players o actores que intervienen en la generación y distribución de energía.
- Generadores: estos incluyen las centrales de energía renovable, como las solares y eólicas; las plantas nucleares; y las centrales térmicas, que dependen de combustibles fósiles.
- Después encontramos los operadores del sistema: quienes transportan la electricidad, como la Red Eléctrica de España.
- Pasa más adelante por las distribuidoras: en España encontramos 5 (Endesa, Iberdrola, E-Redes Distribución (Grupo EDP), Unión Fenosa y Viesgo Distribución (EON))
- Finalmente, en paralelo, se encuentran las comercializadoras: a través del Operador del Mercado Ibérico de Energía (OMIE). Es el caso de Repsol, que facilitan la llegada de esta al consumidor final, haciendo de intermediarios.
Cada uno de estos contribuye a la cantidad de electricidad disponible en el mercado, lo que a su vez influye en el precio:
- Cuando la oferta es alta, especialmente de fuentes renovables, los precios suelen ser más bajos.
- Si hay limitaciones en la producción o si ciertas fuentes no están disponibles, los precios pueden subir.
Las energías más caras, como el gas, influyen en el precio final de la luz, aunque otras energías más baratas, como las renovables, también formen parte del mix energético.
Demanda
La demanda de electricidad fluctúa a lo largo del día, y su impacto en el precio se ve reflejado en las distintas franjas horarias. En el mercado regulado, existen tres franjas principales: punta, llana y valle, que afectan directamente al coste que paga el consumidor según el momento en que consuma energía.
Durante las horas punta, la demanda es más alta. En las horas valle, la demanda es menor. Y en las horas llanas son los tramos de cambio.
Para más detalles sobre cómo funcionan estas franjas horarias, te invitamos a leer nuestro post sobre la discriminación horaria.